Todo es mierda en el mundo que vivimos
y pura mierda por doquier hallamos:
al nacer, con la mierda tropezamos,
y al morir entre la mierda nos hundimos.
Si entre mierda nacemos y morimos
y mierda por doquier hallamos,
nuestro cuerpo con mierda alimetamos,
alimento que en mierda convertimos.
Es mierda el hombre en su carrera oscura,
mierda y más mierda la mujer hermosa,
es mierda el sacristán y mierda el cura.
Hay mierda en poesía y mierda en prosa
y después de ser mierda la criatura,
vive entre mierda y en la mierda goza.